A unos 185 km al noreste de Tokio, en la prefectura de Fukushima, se encuentra la histórica ciudad de Shirakawa. Aquí, al pie de las montañas volcánicas de Nasu, encontrará el parque público más antiguo de Japón, más de 100 restaurantes especializados en Shirakawa Ramen y una ciudad que se ha convertido silenciosamente en sinónimo de tecnología de audio de vanguardia.
Shirakawa Audio Works es la sede de fabricación de Marantz desde 2002. En estas vastas instalaciones trabajan unas 200 personas, una mezcla de talento local y audiófilos de todo Japón, en un viaje para descubrir el sonido más musical posible. Muchos vienen directamente de la escuela, mientras que otros llevan en Audio Works desde su creación hace casi 40 años.
Dedicado a la musicalidad
En todo Japón, las prácticas tradicionales se fusionan a la perfección con las tecnologías diseñadas para el futuro, y lo mismo ocurre en Shirakawa.
Mientras que un ingeniero puede probar la última topología de circuitos de amplificación, otro anodizará la cara de champán de un AVR, una característica que se ha convertido en una marca registrada a lo largo de los años.
Un aprendiz de Audio Works pasará años aprendiendo de los ingenieros de Marantz antes de pasarles la antorcha. De este modo, Shirakawa Audio Works se parece menos a una fábrica y más a un taller o laboratorio; sus empleados son una combinación de artesanos y científicos.
La filosofía japonesa del Kaizen se basa en la creencia de que las mejoras continuas e incrementales se traducen en cambios sustanciales a lo largo del tiempo. El equipo de Audio Works invierte mucho en la planificación y la investigación para que, cuando se lance un producto, éste funcione a la perfección, acerque al oyente a la grabación original y dure.
Estándares exigentes
Con una combinación de precisión científica y artesanía, Marantz se asegura de que sus productos de gama alta se construyan y prueben según los estándares más exigentes. Podría decirse que los equipos de audio de gama alta construidos en Shirakawa se someten a pruebas más rigurosas que cualquier otro producto electrónico de consumo.
Los procedimientos de control de calidad de Marantz rozan el fanatismo y garantizan que cada pieza sea resistente al calor, al frío, a las vibraciones, a la inmersión y a cualquier otro posible percance. Incluso el embalaje se deja caer repetidamente desde una altura y se expone a temperaturas extremas.
Construidos de forma resistente
Los productos de Marantz pueden sobrevivir a lo que la vida les depare, y eso es quizá un reflejo de los propios ingenieros. En 2011, Shirawaka fue devastada por el terremoto de Tōhoku, el más potente jamás registrado en Japón.
Audio Works se vio muy afectado por el desastre, pero solo cuatro meses después las instalaciones volvieron a abrirse y el equipo -ahora con cascos- volvió a trabajar. Hoy día, las grietas causadas por el terremoto recorren las paredes, los suelos y los techos, un recordatorio permanente de la resistencia y la fortaleza de la familia Marantz.
Colección Marantz
Shirakawa es el hogar de una colección única de productos Marantz. Aquí se conservan y mantienen una o más unidades de casi todos los productos de la historia de Marantz.
La luz natural que proporciona el entorno abierto de las instalaciones baña la colección de calidez, reflejando el sonido de Marantz y el optimismo, la amabilidad y el esfuerzo de las personas que elaboran los productos de este singular lugar.
En Shirakawa se construyen los modelos: AV8805A, PM-10, SA-10, PM-KI Ruby, SA-KI Ruby, PM-8006, ND-8006, SR-8015, SA-30n y Model 30.
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